Una nueva inquilina.

Después del mal rato que hemos pasado con la muerte de Jas, ayer adopté esta preciosidad, se que nunca podrá sustituirlo pero si puede hacer más llevadera la pena pues bienvenida sea.
Le hemos llamada "Taca" (Mancha) porque tiene una mancha en la nariz que parece que no tenga nariz y una pequeñita en el morrete, que parece que tenga el piercing ya puesto. Llegó a casa un poco asustada pero lo que más miedo me daba era la reacción de Brusca. Fue demasiado, Brusca la olfateó casi hasta gastarla y cuando terminó le pegó un lametón que la levantó del suelo, ella le ponía la cabecita como queriendo decir ráscame, luego la deje en un sofá (el que tenia Jas para dormir), estuvo olfateando y al final vino a dormirse encima de mi aunque estaba atenta a cualquier ruido. Creo que aunque tenga ya un añito se adaptará bien a nosotros y nosotros a ella.
Brusca estaba feliz y sólo quería jugar, aunque parezca mentira, desde que Jas se fue estaba triste, se pasó el sábado en la terraza llorando, le buscaba por todas partes, se criaron juntos y pasaban todo el día jugando juntos, así que cuando vió a Taca se iluminó, vuelve a tener compañero de juegos.

Un beso